Hoy, tengo antojo de sangre
Probar la sangre
sentirla en mis labios,
en mi cuerpo,
en mi garganta.
¿Así de loca estaré
como para que se me antoje
tomar sangre?
Al menos
unas gotas
sería suficiente
Matar
Sería un buen recuerso
de satisfacer mi antojo...
Beber la sangre que emane de ellos
mientras aun viven.
Escuchar su dolor.
Oir sus súplicas
sin poner atención
Y dejarlos ahi
muriendo lentamente
Terrible
Horror en mis acciones,
terror en sus miradas,
locura regada.
Orgullosa satisfacción
viernes, 15 de enero de 2010
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El sufrimiento eterno esta destinado a la mayoría de nosotros así que un poco de dolor a este cuerpo que nos atora solo es insignificante al dolor que nos harán paga haya abajo, la prueba de nuestras heridas es la sangre que dejamos derramada y que derramamos una deliciosa bebida desperdiciada que lastima.
ResponderEliminarMe gusta tu descripción del sádico vampiro que tenemos dentro.
Iziz