Tumbame en tu cama
Estudia cada parte de mi cuerpo.
Que el juego comienze.
Nuestro campo de batalla
rodeado de rosas y sábanas.
Nuestras armas: el placer y el deseo.
Aquí no hay perdedor, mi amor.
Ambos ganamos
sábado, 30 de enero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
La sangre llama a la sangre...